La Comic Sans ataca de nuevo .

Algunos lo ven como una persona fabulosa, amiga de sus amigos y siempre dispuesta a ayudar desde la hora del desayuno, pero con un aparatoso mullet en el cogote. O como una casa de gente francamente honrada y hospitalaria, cuyas paredes están pintadas con gotelé (color pistacho). Es difícil defender su apariencia, si bien todo en ella es bondad. Y, sin embargo, precisamente su benignidad reconocible, en un universo de caracteres afilados y arribistas, la ha convertido tradicionalmente en el blanco de las chanzas de medio mundo (sobre todo de los que preguntados por nombrar diez tipografías, solo sabrían enumerar ésta y Times New Roman). (Fuente: elpais.com).

Estándar